OCTUBRE IMPERDIBLE
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Clausura
Adaptar las intervenciones a las características de nuestros pacientes es una muy buena idea, pero Considero que la adecuación de las intervenciones a las características particulares del terapeuta es crucial e ineludible. En última instancia, es posible lograr una intervención exitosa utilizando recursos nuevos o desconocidos para el paciente, pero una intervención que utilice recursos nuevos o desconocidos para el terapeuta no es práctica.
Es inevitable guiarse por la forma de las intervenciones, pero al final lo que nos interesa es su función. Trate de considerar, antes de realizar una nueva intervención, cuál es su rol, qué está tratando de lograr o transmitir, y explore qué tan cómodo se siente con el formato de la intervención. Puede ser una buena idea practicarlo en voz alta primero o, mejor aún, probarlo con un colega (por ejemplo, inscribiéndose en un grupo de práctica de compañeros de Portland). Si el formato te incomoda, si la metáfora o el ejercicio no te “cierra”, no te encadenes: recuerda que ACT se basa en procesos, no en procedimientos particulares.
Riesgos de depresión ligados a no tener trabajo
La pérdida de un trabajo y lo que conlleva, dependiendo de la historia vital, puede provocar un shock emocional con signos como:
- Sentirse injusto por haber perdido un trabajo
- Cuestionar mi valor como trabajador o como persona
- Preocupación por el futuro por pérdidas económicas
- Síntomas de ansiedad
- Dificultad para conciliar el sueño
- Desesperación cuando veo que no encuentro trabajo
- Pereza y cansancio cuando mi ritmo de actividad diaria disminuye
Ya están abiertas las inscripciones para el curso online «Terapia de Aceptación y Compromiso e Intervención Psicogerontológica», impartido en Más Formación por Carina Cinalli Ramírez, psicóloga general General de Salud y Vocal Asociación Española de Psicogerontología.
La terapia de aceptación y compromiso ofrece un modelo de flexibilidad psicológica que, aplicado a la población mayor, contribuye a mejorar el bienestar, favoreciendo el mantenimiento de una vida activa, facilitando el ajuste flexible a metas en situaciones de pérdida o y restricciones de comportamiento, y la movilización de comportamientos basados en valores.
Y es que “muchas personas mayores que frecuentan una comunidad o un recurso asistencial piden herramientas para vivir esta etapa de la vida con bienestar, es decir hacer frente a cambios, situaciones críticas , límites y también nuevas perspectivas que se van abriendo”, comenta Carina Cinalli.